Efecto Mariposa ofrecerá éxitos de casi 20 años en gira de conciertos íntimos

El grupo Efecto Mariposa ofrecerá los grandes éxitos de sus casi veinte años de carrera en «Vuela cerca», una gira de conciertos «íntimos» por una quincena de ciudades españolas que comenzará el 6 de marzo en Sevilla y concluirá el 8 de mayo en Málaga.

«Vamos a tocar las canciones más conocidas que nos acompañan desde 2001, y el concepto de la gira el propio título de ‘Vuela cerca’ lo dice, queremos hacer algo muy especial y muy cercano», ha explicado este lunes la vocalista, Susana Alva, en la presentación de la gira, patrocinada por Unicaja Banco.

Habrá «varios tipos de formatos, uno con batería y guitarrista» y otro «en el que surgirán momentos de mucha conexión con el público» y se bajarán del escenario «sin micrófono, desenchufados», con una escenografía «no a lo grande, que dé sensación de cercanía y de intimidad».

Cuando se le pregunta por las modas musicales, Alva se confiesa «incapaz» de hacer algo que no le «naciera» o de meterse «en camisa de once varas», y apuesta por «ser fiel a uno mismo, que es lo que perdura», y por «esa verdad y esa manera que tenemos cada uno de cantar nuestras canciones y de sentirlas».

A lo largo de la carrera de la banda ha habido puntos de inflexión como la colaboración con Javier Ojeda, cantante de Danza Invisible, en la exitosa canción «No me crees», que les «ayudó mucho en ese momento».

«Fue un momento en el que no teníamos compañía discográfica, porque habíamos pedido la carta de libertad en la anterior, Universal, e hicimos un disco con nuestros propios medios», ha explicado Alva.

Coincidieron con Ojeda en un evento en Fuengirola para recaudar fondos para las víctimas del tsunami, le preguntaron si le apetecería colaborar en una canción y poco tiempo después acudió al estudio de su casa.

«Vino con su ropa de ciclista, le dimos un par de opciones de canciones, dijo que le apetecía ésta y la grabamos. Fue un momento no difícil, porque lo elegimos así, pero no sabíamos qué ocurriría con ese disco, vamos siempre paso a paso y ahí fueron dos escalones de una vez», recuerda Alva. (…)

(Publicado en La Vanguardia).